jueves, 13 de julio de 2017
60 años de lucha en Sumapaz (Sintrapaz)
El pasado 1 de julio de 2017 se llevó a cabo la
conmemoración del aniversario número 60 del Sindicato de Trabajadores Agrícolas
de Sumapaz (SINTRAPAZ), sindicato que lleva 60 años luchando por la dignidad de
los campesinos y campesinas de este gran territorio. Este evento se llevó a cabo en el corregimiento de San Juan en la localidad 20
de Sumapaz para reconocer y homenajear a los luchadores y luchadoras del
movimiento Agrario que continúan combatiendo desde la siembra y la dignidad por
el respeto a su tierra y a su futuro.
Con el silencio de los fúsiles en el marco del fin
del conflicto armado en Colombia, el sindicato actualmente apuesta su esperanza
al proceso de paz y esperan seguir trabajando para cuidar su territorio y el
agua; con la terminación del conflicto la apuesta también es persistir por una Reforma Rural Integral, en
la que primen los intereses locales de los campesinos y campesinas y que se dejen de
lado esos intereses económicos por
parte del Estado que derivan en deteriorar los ecosistemas de la región, intereses como los de la megaminería y
el ecoturismo que pone en riesgo el equilibrio ambiental y causan daños irreparables
a un ecosistema tan importante como es el páramo.
Los campesinos luchan para evitar que el páramo
más grande del mundo se convierta en una atracción turística. Los testimonios afirman que el interés de
Estado no ha determinado las consecuencias que pueden traer a futuro estas
actividades. Se quiere evitar las
deplorables experiencias de sistemas frágiles, entre ellas las serranías del
Cocuy y la de la Macarena que han sido cerradas por la contaminación turística,
ocasionado con ello el deterioro de estos ecosistemas.
En el evento estuvieron presentes las familias
que heredaron la permanencia en el sindicato como orgullo de la región y
algunos delegados de organizaciones sociales, ambientales y comunitarias que
han unido fuerzas junto al trabajo del sindicato.
Entre los presente estuvieron miembros de la
UP, historiadores, caricaturistas entre
otros; en cuanto al espacio musical se
destacó la presentación de Julián Conrado, cantante vallenato y representante
de las FARC- EP, quien nos reitero que la Paz no tiene reversa. A esa celebracion se sumaron grupos musicales de la región y acompañado
de un gran bingo que tuvo su premio mayor a las tres de la mañana, hora donde
el baile y la celebración deleitaba a
todos los asistentes.
La Colectiva
Vida y Letra estuvo presente en la conmemoración, compartiendo el reconocimiento y las alegrías
de los campesinos que día a día luchan por su territorio y la dignidad del
campesinado en Colombia. Se ando el páramo
desde el sábado a la una de la tarde. El
punto de encuentro fue en Usme en un transporte que lleva a los ciudadanos rumbo al
corregimiento de San Juan. No lo creeríamos,
pero la localidad más grande de Bogotá está llena de magia traducido en grandísimos
frailejones, junto a un pueblo trabajadador que vive por su territorio.
Nuestra llegada fue a las seis de la
tarde, recorrimos sus calles, sus casas y sus mensajes de dignidad. Nos adentramos posteriormente al salón
comunal a homenajear la lucha digna de
Sintrapaz hasta el otro día cuando de nuevo las rutas de transporte nos
devuelven a Usme para decirnos gracias por entender que el páramo tiene
defensores que desde su cotidianidad se han organizado en Común unidad.
Primera Asamblea Colectiva Vida y Letra
Sábado 17 y domingo 18 de junio
de 2017
Corregimiento de Pasquilla -
Pasquillita
Localidad Ciudad Bolívar, Bogotá
Tenemos el inmenso honor de
presentarles la primera asamblea de la Colectiva Vida y Letra que se reunió
para reconocer y autoreconocerse como miembros de un grupo que transcurrido
algunos meses se ha encontrado para trabajar en común con y para la comunidad de Pasquilla.
Nos planteamos una jornada de dos
días en la zona rural de Pasquilla para socializar, acampar, conversar,
construir, hacer escuelas internas de formación y entre todas y todos construir la Declaración
Constitutiva de Vida y Letra.
Jornada de Afianzamiento
Esta primera asamblea reconocio
talentos y se trazó un plan para llevar a cabalidad esta primera asamblea, luego de concluir en la mañana del sabado la
novena semana del PIP que se desarrolla en Pasquilla, zona rural de la
localidad de Ciudad Bolívar.
Para el día sábado la jornada
empezó desde las 10 de la mañana con la organización de la finca, y la
excavación de un jincho a varios metros
de la casa de campo por intermedio de la pala y una garlancha.
Llega el momento de
almorzar, de reunir los materiales e
ingredientes asignados previamente a cada compañera y compañero de la
colectiva, llego el momento de armar nuestras respectivas carpas para pasar la
noche y ante todo aprovechar la luz natural del sol que en la noche no
encontramos; también llego el momento de caminar cuesta abajo en medio de un
campo inmenso: lleno de mucho verde, barro y de total armonia para llegar luego de casi una hora de camino
a una fracción del nacimiento del rio Tunjuelo, ese que metros más abajo llega
a lo urbano y se convirtiérte en una alcantarilla abierta víctima de la desidia
y el abandono de esta sociedad que vierte a diario residuos a eso que emerge
vida.
En el trascurso de la tarde
realizamos la Escuela de Genero "Pensando y actuando contra la violencia de genero" con la intencion de cuestionar, mejorar, y transformar las relaciones desde la cotidianidad.
Mística
Para terminar el día sábado el
pollo, el agua de panela, el arroz fueron cómplices de una mística al calor del
fogón de la cocina para reconocernos como sujetos saliéndonos de la zona de
confort que el patriarcado nos ha construido en la misma.
Las y los participantes formaron
un circulo, cada uno dibujo un corazón que ocupo la totalidad de la hoja. Se
recorto con las manos el corazón, y se rasgo por la mitad formando dos partes, sin
importar si quedaron bordes irregulares.
Luego de ser rasgado se formo un
montículo con las mitades bien mezcladas. Asi se formo parejas según coincidian
las partes. Un miembro de una pareja cubrio los ojos de la otra persona. Éste procedio a realizarle un masaje en el cuello,
algo sencillo, sin mucha técnica. La idea fue hacer un momento agradable y
relajante. Luego del masaje en el cuello, se procedio a los hombros y a la
espalda. De allí la persona decidia si le masajean las piernas, brazos,
pies. Todo esto se realizo siempre con los ojos cubiertos de quien recibia el
masaje
Luego que se terminaron estos
masajes la persona que lo recibió,
realizo el mismo proceso con su pareja, siempre con el consentimiento de
la otra persona.
Finalmente, se pìdio que hablaran acerca de sus experiencias, sobre
su orientación sexual, la manera en la que viven su género, qué criticas tienen
respecto a eso, cómo fue su experiencia desde niños(as), cómo descubrió sus
preferencias. La esencia fue hablar de la deconstrucción de géneros, comprendiendo
que frente a nosotros(a) hay un otro, un cuerpo y un ser que ha estado atrapado en
códigos impuestos y normalizados en la sociedad, generando distancia y miedo.
El reinicio de un nuevo día
El día domingo los miembros de la
colectiva despiertan, desayunan, desarman sus camping y se alistaron para
declarar la constituyente de Vida y Letra.
Fueron cuatro horas de dialogo,
posturas y argumentos que desde el afecto permitió construir un documento que
nos da una guía y fortalece nuestros caminos
comunes al revisar un proyecto que para
este año se echa a andar con más fuerza al incluir nuevos miembros que
actualmente trabajan desde nuevas apuestas educativas en el territorio de
Pasquilla.
El maní, las galletas, la
mermelada, el agua de panela, el lulo y el calor estuvieron presentes para
declarar entre todas y todos nuestro documento dialógico constituyente de la
Colectiva Vida y Letra. Paulo Freire, uno de los
pedagogos más influyentes de América Latina dijo: "La educación no cambia
al mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo.".
Esto es Vida y Letra.
lunes, 10 de julio de 2017
Tejiendo raices
Educación Popular es incidir en el territorio, generar afectos y creer que nuevos mundos si son posibles.
Esta fue parte de nuestra participación en el segundo encuentro por la paz que se celebro en Pasquilla el pasado 9 de julio de 2017 donde la unidad nos permitió ser parte de una actividad que solo tenia la intención de integrar a la comunidad.