Sábado 17 y domingo 18 de junio
de 2017
Corregimiento de Pasquilla -
Pasquillita
Localidad Ciudad Bolívar, Bogotá
Tenemos el inmenso honor de
presentarles la primera asamblea de la Colectiva Vida y Letra que se reunió
para reconocer y autoreconocerse como miembros de un grupo que transcurrido
algunos meses se ha encontrado para trabajar en común con y para la comunidad de Pasquilla.
Nos planteamos una jornada de dos
días en la zona rural de Pasquilla para socializar, acampar, conversar,
construir, hacer escuelas internas de formación y entre todas y todos construir la Declaración
Constitutiva de Vida y Letra.
Jornada de Afianzamiento
Esta primera asamblea reconocio
talentos y se trazó un plan para llevar a cabalidad esta primera asamblea, luego de concluir en la mañana del sabado la
novena semana del PIP que se desarrolla en Pasquilla, zona rural de la
localidad de Ciudad Bolívar.
Para el día sábado la jornada
empezó desde las 10 de la mañana con la organización de la finca, y la
excavación de un jincho a varios metros
de la casa de campo por intermedio de la pala y una garlancha.
Llega el momento de
almorzar, de reunir los materiales e
ingredientes asignados previamente a cada compañera y compañero de la
colectiva, llego el momento de armar nuestras respectivas carpas para pasar la
noche y ante todo aprovechar la luz natural del sol que en la noche no
encontramos; también llego el momento de caminar cuesta abajo en medio de un
campo inmenso: lleno de mucho verde, barro y de total armonia para llegar luego de casi una hora de camino
a una fracción del nacimiento del rio Tunjuelo, ese que metros más abajo llega
a lo urbano y se convirtiérte en una alcantarilla abierta víctima de la desidia
y el abandono de esta sociedad que vierte a diario residuos a eso que emerge
vida.
En el trascurso de la tarde
realizamos la Escuela de Genero "Pensando y actuando contra la violencia de genero" con la intencion de cuestionar, mejorar, y transformar las relaciones desde la cotidianidad.
Mística
Para terminar el día sábado el
pollo, el agua de panela, el arroz fueron cómplices de una mística al calor del
fogón de la cocina para reconocernos como sujetos saliéndonos de la zona de
confort que el patriarcado nos ha construido en la misma.
Las y los participantes formaron
un circulo, cada uno dibujo un corazón que ocupo la totalidad de la hoja. Se
recorto con las manos el corazón, y se rasgo por la mitad formando dos partes, sin
importar si quedaron bordes irregulares.
Luego de ser rasgado se formo un
montículo con las mitades bien mezcladas. Asi se formo parejas según coincidian
las partes. Un miembro de una pareja cubrio los ojos de la otra persona. Éste procedio a realizarle un masaje en el cuello,
algo sencillo, sin mucha técnica. La idea fue hacer un momento agradable y
relajante. Luego del masaje en el cuello, se procedio a los hombros y a la
espalda. De allí la persona decidia si le masajean las piernas, brazos,
pies. Todo esto se realizo siempre con los ojos cubiertos de quien recibia el
masaje
Luego que se terminaron estos
masajes la persona que lo recibió,
realizo el mismo proceso con su pareja, siempre con el consentimiento de
la otra persona.
Finalmente, se pìdio que hablaran acerca de sus experiencias, sobre
su orientación sexual, la manera en la que viven su género, qué criticas tienen
respecto a eso, cómo fue su experiencia desde niños(as), cómo descubrió sus
preferencias. La esencia fue hablar de la deconstrucción de géneros, comprendiendo
que frente a nosotros(a) hay un otro, un cuerpo y un ser que ha estado atrapado en
códigos impuestos y normalizados en la sociedad, generando distancia y miedo.
El reinicio de un nuevo día
El día domingo los miembros de la
colectiva despiertan, desayunan, desarman sus camping y se alistaron para
declarar la constituyente de Vida y Letra.
Fueron cuatro horas de dialogo,
posturas y argumentos que desde el afecto permitió construir un documento que
nos da una guía y fortalece nuestros caminos
comunes al revisar un proyecto que para
este año se echa a andar con más fuerza al incluir nuevos miembros que
actualmente trabajan desde nuevas apuestas educativas en el territorio de
Pasquilla.
El maní, las galletas, la
mermelada, el agua de panela, el lulo y el calor estuvieron presentes para
declarar entre todas y todos nuestro documento dialógico constituyente de la
Colectiva Vida y Letra. Paulo Freire, uno de los
pedagogos más influyentes de América Latina dijo: "La educación no cambia
al mundo: cambia a las personas que van a cambiar el mundo.".
Esto es Vida y Letra.